lunes, 15 de octubre de 2012

A prayer for my daughter, Eastern 1916 /II; La poesía y su reconocimiento



«Ésta Irlanda existe, el que vaya y no la encuentre, no venga al autor con reclamaciones» Böll, Hendrich, Irish Journal. (Advertencia inicial)

Escribir sobre temas como son el destino, la libertad, el territorio, el futuro, la guerra, la religión y la muerte; y sin ni siquiera mencionarlos; pone en juego toda la cordura, incluso la del  lector consciente o espectador; y lo que si se menciona: el odio, la mente, los cielos, el morir(se), la prosperidad, el viento, la tormenta, la comunidad; la relación que hay entre el territorio y la persona es como la de un pez con el agua, no se sabe que se está en ella. La Literatura irlandesa, siempre está rozando entre el desarrollo artístico, la cultura política y el amor por su isla, su patria. Quizá por haber tenido que manejar siempre oculto el idioma local son capaces de darle  a sus textos, varios niveles de lectura y Yeats no es la excepción; que siempre parece estar hablando de incidentes cotidianos, mundanos y si se fija uno bien en las palabras siempre hay un algo distinto y cuando parece que se ha descifrado el enigma, éste reaparece o aparece otro.
«Yes, the newspapers were right: snow was general all over Ireland. It was falling on every part of the dark central plain, on the treeless hills, falling softly upon the Bog of Allen and, farther westward, softly falling into the dark mutinous Shannon waves. It was falling, too, upon every part of the lonely churchyard on the hill where Michael Furey lay buried. It lay thickly drifted on the crooked crosses and headstones, on the spears of the little gate, on the barren thorns. His soul swooned slowly as he heard the snow falling faintly through the universe and faintly falling, like the descent of their last end, upon all the living and the dead.» Tr: «Sí, los periódicos tienen razón, la nieve está cubriendo toda Irlanda. Cae sobre toda la oscura llanura central, sobre las colinas despobladas, suavemente sobre los pantanos de Allen, y más lejos, hacia el oeste. Cae suavemente sobre las oscuras y revueltas aguas del Shanon. Uno a uno, todos nos convertiremos en sombras… en todos los que alguna vez han vivido, desde el principio de los tiempos, y en mí, transeúnte como ellos, fluctuando también hacia su mundo gris, como todo lo que me rodea. Este mismo sólido mundo, en el que ellos se criaron y vivieron, se desmorona y se disuelve.  Cae la nieve, cae sobre ese solitario cementerio en el que Michael Fiuri yace enterrado. Cae lánguidamente en todo el universo y lánguidamente cae, como en el descenso de su último final, sobre todos los vivos y los muertos.» Joyce, James, The Dubliners; The Dead. (Parrafo final)


Traducción
Una oración para mi hija     Pascua 1916     

Una vez más la tormenta está aullando, y se esconde     Me he reunido con ellos al final del día     .
                          Bajo éste velo y cubre cuna     Llegaban con las caras animadas
                           Mi niña duerme. No hay obstáculo    De ventanillas o escritorios en abandono
Salvo el bosque Gregory y una colina desnuda,    Casas del siglo dieciocho.                .
                           Entre los pajares- y el viento rasante,    He pasado con un movimiento de cabeza,     Engendrado en el Atlántico, puede estar detenido;     O una amable frase hecha,                      .
    Y por una hora he caminado y rezado     O me he detenido un rato y dije
 Pues una gran oscuridad nubla a mi mente.     Amables frases hechas,             .   .

He caminado y rezado por ésta pequeña una hora      Y antes de terminarla he pensado,         .
 Y oía al viento marino aullar sobre la torre,     En un escarnio o maldición      .   
             Y-bajo los arcos del puente, y aúlla      Para complacer al compañero      
  y entre los olmos del arroyo inundado,  aúlla     Cerca de la chimenea, en el club,     
                Imaginando en agitados ensueños     Seguro estaba de que ellos y yo     
                                  Que el porvenir había llegado,     Pero vivíamos como bufones desgastados:
     Bailando al son de un frenético tambor,     Todo cambió, cambió totalmente:
Surgido de la asesina inocencia del mar.      Una terrible belleza ha nacido.

  Podría concederse belleza, mas no aún     Los días de esa mujer se gastar
Belleza que crea angustia en ojos ajenos,     En ignorante buena voluntad  .
O los suyos ante un espejo, para ello,    Sus noches en discusión    .
                                 Siendo demasiado bella    Hasta que su voz creció estridente
              Considerar la belleza un fin suficiente,     Acaso hay voz mas dulce que la suya
   Perder la bondad natural y tal vez     Cuando, hermosa y joven, 
El íntimo descubrimiento del corazón     Cabalgó los lebreles?         ..
     Que elige bien, y nunca conoce la amistad.    Éste hombre dirigía una escuela       

Helena, la elegida, halló su vida plana y aburrida    Y cabalgó nuestro caballo alado;           
Y después tuvo muchos problemas por un tonto,    Éste otro, su ayudante y amigo,          
 Mientras aquella gran Reina, surgida de la espuma     Empezaba a mostrar fuerza,                      
       Siendo huérfana pudo haber tenido su camino    Podría haber adquirido prestigio al final,
Hasta eligió como hombre a un herrero patizambo.     Muy sensible parecía su naturaleza,        .
    Es de cierto que las mujeres delicadas comen    .Tan atrevido y dulce pensamiento.       
                       Una ensalada loca con su carne     Éste otro hombre Yo había soñado     
Por la que el Cuerno de la Abundancia se deshace.    Un patán borracho, apestoso.                    

Instruida en la cortesía la tendré principalmente;     Habría hecho el más amargo mal     . 
Los corazones no se regalan, pero que se ganan     A personas cercanas a mi corazón   .
              Por quienes no son hermosos del todo;     Aún así cuenta en esta canción;        
          Sin embargo muchos, que juegan al tonto     Él, también, ha renunciado a lo suyo
     Por la belleza en sí, tiene encanto hecho astucia.    En la comedia cotidiana;                        .
      Y muchos como un pobre hombre que ha vagado,     Él, también, ha cambiado en su momento
                              Amó y amado se creyó,     Completamente transformado:
De una forma amable no puede apartar sus ojos.     Una terrible belleza ha nacido.         

Puede convertirse en oculto árbol floreciente,     Corazones con un sólo propósito
      Que todos sus pensamientos sean como los Tordos     A lo largo de inviernos y veranos parecen
Sin otra preocupación que regalar a su entorno     Piedras encantadas                          
                      Los prodigios de su canto,     Que agitan las aguas vivas.
         Pero ni en la alegría de una persecución,     El caballo que corre por la senda,
        Pero ni en la alegría de una disputa,     El jinete, los pájaros al vuelo
           O puede que viva como un verde laurel     Atravesando nubes y nubarrones:
       Enraizada perpetuamente en un lugar de cariño.     Momento tras momento van cambiando;

         Mi mente, por las mentes que he amado,     Una sombra de nube en el cauce,
                       Lo poco de belleza que he aprobado,    Va cambiando momento tras momento;
Prospera pero poco, se ha secado en los últimos tiempos,     Un casco resbala en la ribera,              .
Sin embargo, sabe que asfixiarse en el odio     Y un caballo cae chapoteando;
Bien puede ser de todos el mayor de los males.    Las grullas va a sumergirse,         .
                            Si no hay odio en la mente     Llama una hembra a un macho;
               El asalto y la agresión del viento     Momento tras momento viven,
     Jamás podrá arrancar el Tordo de la rama.     Y la piedra sigue a mitad de todo.


           El odio intelectual es el peor,     Tan largo un sacrificio.
Así, mejor que crea a las opiniones detestables.     Puede hacer un piedra del corazón
  ¿No he visto a la mujer más adorable     Ah, ¿cuándo se hartarán?
   Nacida de la boca del Cuerno de la Abundancia,    Ese es el papel de los cielos, el nuestro
                 A causa de su mente que opina     Musitar nombre tras nombre,
               Cambiar ese Cuerno y cada bien     Como una madre el de su hijo,
  Que las personas calmas comprendían     Cuando al fin el sueño llega
Por un viejo fuelle lleno de viento airado?     A piernas que corrieron duro.

Tomando en cuenta que, expulsado todo el odio,   ¿Qué es esto sino el anochecer?     .
              El alma recupera su radical inocencia    No, no, no la noche pero la muerte;
                Y aprende al final que a sí misma se está,    ¿Fue inútil esa muerte al fin y al cabo?
                     Que a sí misma se inquieta y se apacigua,      Por Inglaterra puedo mantener la guardia
     Y que su propio bien es el del Cielo;     Por todo lo dicho y hecho.
 Ella puede, aunque cada rostro deba ajarse     Sabemos que sueñan; suficiente
                                  Y cada uno de los vientos aúlle     Con saber que soñaron y están muertos
      O cada fuelle reviente, ser aún feliz.     ¿Y qué si el exeso de amor
           Y que su esposo la lleve a una casa     Los aturdió hasta la muerte?

Donde habite la costumbre y la ceremonia     Escribí esto en verso -           .
Pues la arrogancia y el odio son la mercancía     MacBride y MacDonagh              .
Que se vende en cualquier calle.    Y Pearse y Connolly
¿Cómo si no, fuera de costumbre y ceremonia,    ahora y en el tiempos que será,    .
                    Podrán nacer la belleza y la inocencia?     dondequiera que el verde sea exhibido,
Ceremonia es el nombre de donde vienen todos los dones     habrán cambiado, cambiado totalmente
Y costumbre el del árbol de frondoso laurel.      una terrible belleza ha nacido.

William Butler Yeats
la traducción es propia.

A prayer for my daughter, Eastern 1916 /I; La poesía y su reconocimiento


Pero aún sin sombras, suspiros o tiempo; hay algo, que compromete lo humano, la dignidad, en ese momento en el cual por su existencia misma o por exigencia de las circunstancias, del tiempo, el lugar o el grupo (la comunidad); la voluntad propia debe ceder(se) al otro o a los otros, a «lo que corresponde» y es aquí, donde se distingue el valor de la cobardía, el sustento del vacío, el fuste del engaño, la pieza, lo que se es y lo que persiste. Así como la gramática del idioma es la estructura misma del pensamiento; aquello a lo que llamamos el carácter, que es el modo de sentir, el de la aproximación para pensar la vida, el del compromiso para con la naturaleza, el pensamiento reflexivo y el trabajo, están estrechamente ligados a la geografía (en su forma), el clima (en su sustancia), la historia (en su duelo) y la comunidad (en su supervivencia); son las características propias de cada latitud las moldean a las personas y a sus pensamientos colectivos; las personas son «con y como» es su lugar y son irremediablemente de éste; aún los más desarraigados, tienen su lugar oculto, a veces hasta teórico o utópico, su propia isla, su país de la utopía, sus ciudades invisibles, en donde el clima les trae a la memoria el sonido del entorno natural o social que escuchaban mientras se alimentaban con la leche materna; la luz que iluminaba la casa, la calle o el campo donde por primera vez anduvieron o se pusieron en pie, siempre hay un árbol que hace sombra y ¿cómo es esa sombra? por ejemplo, para los que nacen y nacieron en las altas serranías de los Himalayas, que mueren sin haber visto nunca un árbol; ¿qué fue la idea de distancia para las huestes napoleónicas, que enloquecieron de agarofobia frente las interminables llanuras de la estepa rusa que parece eterna; los lugares fantásticos que describen los viajeros, lugares distintos que siempre tienen a su gente distinta, la que pertenece a ese lugar la que ahí se hizo con las costumbres y las condiciones que responden a su lugar, lugar al que le dan nombre, bandera y límite: frontera. Esa Irlanda entera de roca sólida, la que soñaron los celtas, está más cerca; en la misma isla desolada, de colinas desnudas y tormentas sorpresivas; pero más republicana, más libre, menos católica; es también la misma que hoy juega, a ser la capital del capital y en la que aún hay pobreza y, Yeats especialmente en dos poemas, «A prayer for my daughter» (1919) y «Estern 1916» (escrito en septiembre 1916) ambos compuestos por ochenta líneas en verso y escritos en momentos muy distintos; dos poemas que literalmente se complementan el uno a otro, línea por línea; en los cuales describe lo que es irlanda (A terrible beauty is born), lo que son los irlandeses, sus formas, sus miedos, sus lealtades (To some who are near my heart), sus costumbres (Ceremony's a name for the rich horn) y también sus odios (For England may keep faith). El porqué de que ésta isla le ha dado tanto a una lengua conquistadora, lengua que en un principio fue enemiga, pero que en las mentes (Because of her opinionated mind), cultura y modos irlandeses (My mind, because the minds that I have loved), a conseguido darle a la humanidad, una extensa y vasta literatura, llena de fantasía y creatividad; de ideas propias; con reflexiones insuperables; y por supuesto, grande en calidad, extensa en cantidad y sumamente profunda, poesía:



A prayer for my daughter    Eastern 1916

Once more the storm is howling, and half hid    I have met them at close of day
    Under this cradle-hood and coverlid     Coming with vivid faces
            My child sleeps on. There is no obstacle     From counter or desk among grey
      But Gregory's wood and one bare hill     Eighteenth-century houses.
     Whereby the haystack- and roof-levelling wind.     I have passed with a nod of the head
             Bred on the Atlantic, can be stayed;     Or polite meaningless words,
        And for an hour I have walked and prayed     Or have lingered awhile and said
Because of the great gloom that is in my mind.     Polite meaningless words, ...…..

I have walked and prayed for this young child an hour    And thought before I had done              . 
    And heard the sea-wind scream upon the tower,     Of a mocking tale or a gibe          .     
  And-under the arches of the bridge, and scream     To please a companion                  . 
     In the elms above the flooded stream;     Around the fire at the club,
                      Imagining in excited reverie     Being certain that they and I
                       That the future years had come,     But lived where motley is worn:
                        Dancing to a frenzied drum,     All changed, changed utterly:
  Out of the murderous innocence of the sea.     A terrible beauty is born.       . 
       
        May she be granted beauty and yet not     That woman's days were spent
Beauty to make a stranger's eye distraught,     In ignorant good-will,           . 
Or hers before a looking-glass, for such,     Her nights in argument     .   
            Being made beautiful overmuch,    Until her voice grew shrill.
                     Consider beauty a sufficient end,     What voice more sweet than hers
            Lose natural kindness and maybe     When, young and beautiful,
       The heart-revealing intimacy     She rode to harriers?
That chooses right, and never find a friend.     This man had kept a school    . 

Helen being chosen found life flat and dull     And rode our winged horse;   .
      And later had much trouble from a fool,     This other his helper and friend
While that great Queen, that rose out of the spray,     Was coming into his force;                 .
                    Being fatherless could have her way     He might have won fame in the end,
    Yet chose a bandy-leggèd smith for man.     So sensitive his nature seemed,
                      It's certain that fine women eat     So daring and sweet his thought.
                    A crazy salad with their meat     This other man I had dreamed
   Whereby the Horn of plenty is undone.     A drunken, vainglorious lout.

    In courtesy I'd have her chiefly learned;     He had done most bitter wrong
Hearts are not had as a gift but hearts are earned     To some who are near my heart,        .
 By those that are not entirely beautiful;     Yet I number him in the song;
       Yet many, that have played the fool     He, too, has resigned his part
For beauty's very self, has charm made wisc.     In the casual comedy;                  .
                And many a poor man that has roved,      He, too, has been changed in his turn,
Loved and thought himself beloved,     Transformed utterly:       .
From a glad kindness cannot take his eyes.     A terrible beauty is born.           
             
May she become a flourishing hidden tree     Hearts with one purpose alone
    That all her thoughts may like the linnet be,     Through summer and winter seem
And have no business but dispensing round     Enchanted to a stone                .
                Their magnanimities of sound,     To trouble the living stream.
                    Nor but in merriment begin a chase,     The horse that comes from the road.
                 Nor but in merriment a quarrel.     The rider, the birds that range
         O may she live like some green laurel     From cloud to tumbling cloud,
             Rooted in one dear perpetual place.     Minute by minute they change;
.
My mind, because the minds that I have loved,     A shadow of cloud on the stream .
The sort of beauty that I have approved,     Changes minute by minute;
           Prosper but little, has dried up of late,     A horse-hoof slides on the brim,
      Yet knows that to be choked with hate     And a horse plashes within it;
              May well be of all evil chances chief.      The long-legged moor-hens dive,
                     If there's no hatred in a mind     And hens to moor-cocks call;
              Assault and battery of the wind     Minute by minute they live:
      Can never tear the linnet from the leaf.     The stone's in the midst of all.

An intellectual hatred is the worst,      Too long a sacrifice   .
      So let her think opinions are accursed.     Can make a stone of the heart.
Have I not seen the loveliest woman born     O when may it suffice?         .
            Out of the mouth of plenty's horn,     That is Heaven's part, our part
            Because of her opinionated mind     To murmur name upon name,
             Barter that horn and every good     As a mother names her child
                  By quiet natures understood     When sleep at last has come
 For an old bellows full of angry wind?     On limbs that had run wild.

Considering that, all hatred driven hence,     What is it but nightfall?        .
      The soul recovers radical innocence     No, no, not night but death;
  And learns at last that it is self-delighting,     Was it needless death after all?
              Self-appeasing, self-affrighting,     For England may keep faith
And that its own sweet will is Heaven's will;     For all that is done and said.     .
    She can, though every face should scowl     We know their dream; enough
                               And every windy quarter howl     To know they dreamed and are dead;
   Or every bellows burst, be happy Still.     And what if excess of love

And may her bridegroom bring her to a house     Bewildered them till they died?
Where all's accustomed, ceremonious;    I write it out in a verse -
     For arrogance and hatred are the wares     MacDonagh and MacBride
                 Peddled in the thoroughfares.     And Connolly and pearse
  How but in custom and in ceremony     Now and in time to be,
           Are innocence and beauty born?     Wherever green is worn,
           Ceremony's a name for the rich horn,     Are changed, changed utterly:
And custom for the spreading laurel tree.     A terrible beauty is born.  .


William Butler Yeats